

SEMILLA DE CALIDAD PRIORIDAD PARA LA PRESENTE SIEMBRA DE SOJA
02/oct/2009
Este año la germinación de semilla de soja presenta deficiencias acentuadas, lo que ha determinado que varios lotes hayan tenido que ser descartados, en tanto otros requieren aumentar la densidad, al tiempo que son más aquellos que demandan un tratamiento específico en la semilla
Por: Aldo Norberto Bonaveri
Todas las estimaciones y aprestos hacen suponer que la presente campaña sojera, marcará un récord de superficie a sembrar con la oleaginosa en nuestro país; por estos tiempos, es el único cultivo que despierta motivaciones reales para su implantación. Los síntomas que así va ha ocurrir son elocuentes y, se reflejan nítidamente en semilleros, agronomías, cooperativas y acopios, con la demanda de semilla y, también de glifosato.
Como siempre sucede cuando se dan picos de incrementos del área, suelen aparecer complicaciones de logística o falta de determinadas variedades en particular. Estas dificultades sobrevienen sobre todo en aquel segmento de productores menos previsores, que se demoran en efectuar las reservas en tiempo y forma, quienes finalmente terminan sembrando lo que encuentran, que no siempre es lo que desean o mejor, lo que les conviene.
Como queda dicho se trata de un tema que no es nuevo, pero si este año puede tener complicaciones extendidas, situación que está directamente relacionada con limitaciones que se verifica en disponibilidades de semilla de buena calidad. El ámbito adverso en la materia comienza con la anómala campaña pasada, donde los efectos de la gran sequía no solamente incidieron negativamente en el volumen cosechado, sino que también conspiraron con la calidad de granos en general y simientes en particular.
En razón de esa realidad, el agricultor debe acentuar las precauciones que corresponde tomar en condiciones normales; (las que no todos cumplimentan habitualmente). La adopción de recaudos debe adoptarse en todos los casos, pero mucho más aún, cuando la semilla a implantar no proviene de un origen confiable, como lo es la adquisición de mercadería original o fiscalizada. En nuestro país, un gran porcentaje de la siembra se realiza con semilla propia o, comprada en el circuito irregular, en ambos casos es necesario sin dilaciones, extremar análisis y controles recurrentes, puesto que el productor queda expuesto, justamente en una campaña que a priori se sabe, que existen más problemas de lo normal.
En materia de enfermedades vinculadas a la falta de calidad de la semilla, cabe citar “phomopsis, fusarium, cercóspora, etc”, si bien la presencia de estos patógenos no es insalvable, para ello es menester practicar los análisis sanitarios pertinentes, de forma tal de saber con precisión, cuál es la recomendación de tratamiento de fungicidas adecuados, cuando sean controlables y, no superen los niveles en los cuales sea posible efectuar una corrección mediante un tratamiento de la semillas.
En la obtención de simientes de buen valor cultural, existen varios factores conspirativos para alcanzarlo y, estos se expresan en las distintas instancias que van desde que el cultivo está en el campo, pasando por la recolección, el almacenaje y que recién culmina cuando la semilla está en la sembradora.
Conciente de todas estas vicisitudes, la primera recomendación pasa por realizar un análisis de germinación y calidad, en un laboratorio reconocido por el INASE donde se practiquen las normas ISTA. Si el resultado es satisfactorio, el productor podrá procesar su simiente, confirmar la compra o, retirar la reserva. No obstante allí no terminan las precauciones, es menester como mínimo repetir el análisis anterior, practica ésta que muchos agricultores omiten, seguramente porque desconocen los riesgos que se están corriendo.
Reiterar el análisis no significa ser desconfiado, sino organizado y profesional, así corresponde ya que cualquier razonamiento debe partir sobre el entendimiento que se trata de seres vivos, y como tales, son pasibles de alteraciones originadas por diversas causas, máxime cuando existen tantos agentes que pueden provocar un deterioro en la aptitud de la simiente. Al respecto, conviene recordar que la Ley 20.247, de Semillas y Creaciones Fitogenéticas, que expresamente exime de responsabilidades al fiscalizador o identificador (en cualquier especie) y, por extensión al comercializador, en cuanto a poder germinativo, con posterioridad a los 45 días de entregada la mercadería.
Además de las contundentes razones apuntadas, la reiteración del análisis constituye un factor de seguridad, ante movimientos imprecisos, aleatorios, negligentes, etc.; tales como pueden ser; muestras no extraídas correctamente, efecto nocivo de algún agroquímico en el depósito (no deben estar en el mismo local de las semillas), entrega de una mercadería diferente a la testeada, etc.
También es importante conocer cual es el vigor que cuenta la semilla a sembrar, puesto que hay lotes que presentan un buen poder germinativo, con adecuado stand de plántulas normales, pero esto no significa que el vigor sea el propicio, con éste análisis, el agricultor conocerá cual será la aptitud de esa semilla en caso de que tenga que ser sembrada en ambientes menos favorables.
Este año la germinación de semilla de soja presenta deficiencias acentuadas, lo que ha determinado que varios lotes hayan tenido que ser descartados, en tanto otros requieren aumentar la densidad, al tiempo que son más aquellos que demandan un tratamiento específico en la semilla. La desoptimización no obedece a un solo principio; en algunos casos se pueden atribuir tanto al adelantamiento como al retraso en la época de siembra. En escenarios complicados como los que atravesaron los cultivos en el ciclo pasado, los ambientes de maduración se vieron afectados y de allí las complicaciones.
De consultas a diversos laboratorios en distintas zonas, surgen que los análisis arrojan resultados en muchos casos negativos: Si bien los inconvenientes se expresan en diferentes regiones, lotes de semilla provenientes de Córdoba, Santa Fe y La Pampa evidencian más inconvenientes, justamente coinciden donde la falta de agua se hizo más notoria. Otra particularidad que se presenta con frecuencia este año, es un alto porcentaje de granos verdes, especialmente verificado en ciclos cortos, este componente también influye perniciosamente en la facultad reproductiva de la semilla.
El curado previo a la siembra es una práctica que en los últimos años fue creciendo gradualmente, la técnica es beneficiosa dado que constituye el punto de partida para conseguir un buen stand de plantas en el cultivo a implantar y, principalmente para eliminar los posibles patógenos que afecten las simientes, como así también prevenir enfermedades que provengan del terreno a sembrar.